Serás Lucía para ti
Su deseo tenía limitantes por las tardes, cuando le venían esos sentimientos de dolor sin saber que era un dolor. Sentía el cuerpo volátil, como lo siente un adolorido por la pérdida de un ser querido, sentía una profunda tristeza como la siente un recién condenado. Y el deseo de vivir se le quebraba en trozos como si fuera de barro.