Reportajes

La gran mentira del fideicomiso de apoyo al deporte
En 2015 el Congreso Nacional ordenó a la Secretaría de Finanzas la firma de un fideicomiso con la intención de mejorar las condiciones de los atletas hondureños. Sin embargo, tras ejecutarse más de 493 millones de lempiras (USD 20 millones) entre 2016 y 2021, los principales beneficiarios resultaron ser empresas de construcción, diputados y la selección masculina de fútbol, en un proyecto con múltiples irregularidades que dejó a los atletas de disciplinas diferentes al fútbol en la desesperanza que tenían previo al proyecto. El artífice de esto fue Gerardo Fajardo, mano derecha del excandidato presidencial del Partido Nacional, Nasry Asfura.

El hospital de nunca jamás en Ixcán
Hace ocho años el gobierno prometió construir el primer hospital de la historia de Ixcán, un municipio en el oeste de Guatemala marcado por las masacres en la guerra civil y el abandono del Estado en la democracia, pero cuando llegó la pandemia la corrupción ya lo había convertido en ruina.

La toma de Nuevas Ideas: la historia oculta del partido de Bukele
Nuevas Ideas está por cumplir un año al frente del Legislativo, diseñado para darle a Nayib Bukele todo lo que este pide, constitucional o no. Pero no siempre fue el partido del presidente: fue creado por la diáspora en Estados Unidos para incidir en la política de El Salvador. La Prensa Gráfica y la Redacción Regional reconstruyen cómo miembros fundadores le ofrecieron a Bukele un vehículo para llegar a la presidencia y acabaron expulsados de su partido por Nayib y su círculo cercano.

La obrera que venció en juicio al hombre más rico de Honduras
Olivia Aurora fue despedida en septiembre del 2016 y desde entonces inició una batalla legal contra el Grupo Karims, el conglomerado que pertenece a Yusuf Amdani, un paquistaní con nacionalidad hondureña dueño del centro comercial Altara, Altia Business Park, Merendón Hills y el gigantesco parque maquilero Green Valley.

El temor al secuestro no detiene el éxodo de un país atormentado
Para entender el éxodo hondureño hay que revisar la historia de la última década de este país: un golpe de Estado, un país saqueado y pobre y un narcoestado. En Lucerna, un pequeño pueblo fronterizo en el occidente de Honduras, un obrero puede ganar 36 dólares a la semana, pero en Estados Unidos puede conseguir hasta 22 veces más en ese mismo tiempo. Esta es una historia que se repite en el pueblo y en el país entero: ser secuestrado, golpeado, abandonado en el desierto para lograr el sueño de salir de Honduras y vivir dignamente en un país ajeno. No hay miedo que valga con esos cálculos de sobrevivencia.

Dos Fundecimas, dos diplomáticos y el círculo alrededor del expresidente hondureño
Un grupo de amigos y familiares del expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández — a quien el Gobierno estadounidense acaba de pedir en extradición para enfrentar juicio en Nueva York acusado por tres delitos de narcotráfico — han sido socios desde hace una década en un enjambre de empresas con y sin ánimo de lucro en Honduras y en Florida, Estados Unidos, muchas de ellas sin actividad aparente. Los rastros también llevan a Panamá. Eso dicen los documentos. Los socios, entre los que figuran los embajadores actuales en México y República Dominicana, un sobrino del expresidente y un exconsultor financiero del Congreso Nacional, explican que el escándalo de la ONG Fundecima les arruinó sus sueños de emprender juntos y que por eso la mayoría de las empresas no funcionaron.
PODCASTS
¿Qué opinan los nuevos votantes de las elecciones hondureñas en 2021?
