
Entre violencia y desplazamiento, el arte sigue siendo el refugio de la juventud en San Pedro Sula
Con la mochila al hombro y el carnet al cuello, camino hacia la Casa Cultural Warriors, en Chamelecón, San Pedro Sula, Honduras. Este lugar es más que un trabajo para mí: es la materialización de sueños y esfuerzos acumulados durante 15 años, ahora convertidos en un espacio comunitario donde niños, niñas, adolescentes y jóvenes pueden acceder a oportunidades de formación desde un enfoque artístico y de derechos humanos.