Texto: Ana Irías
Fotografía: Martín Cálix
La depresión tropical Eta ha dejado varios daños en los 18 departamentos de Honduras, se han reportado 11 muertos y 338.563 damnificados, 2.764 personas evacuadas y 2.675 albergadas por las lluvias, así lo ha informado la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco).
Yadira Cruz es una locataria del Mercado Emmanuel que está ubicado a la orilla del río Choluteca en Comayagüela, en la capital del país. Ella tiene un negocio de abarrotería y achinería, que según ella, ha reportado pérdidas de alrededor de 600 dólares (unos 15 mil lempiras). Hace más de diez años se dedica al comercio con el cual da sustento a su hogar que consta de siete miembros de los cuales cinco son menores de edad.
Cruz relata que no solamente ella ha perdido, sino que también 15 locatarios más que desde la llegada de la pandemia por Covid-19 no han logrado levantarse, ni ponerse al día con el pago mensual que deben realizar en sus locales.
"Gracias a Dios estamos vivos, la mayoría de locatarios lo hemos perdido todo nuevamente. Nos impactó el huracán Mitch, la tormenta Ágata, el coronavirus y ahora esto, solo nosotros sabemos lo que nos ha costado", dice.
También les hace un llamado a las autoridades que ya que han solicitado ayuda para atender la emergencia “que se acuerden de la gente que realmente necesita, quieren 35 millones escuché yo de un presupuesto llamado Fondo Verde. Que Dios toque el corazón de quienes nos gobiernan y que nos ayuden y no se lo roben”.
En la zona de Comayagüela, donde Yadira tiene su negocio, la Alcaldía Municipal del Distrito Central (AMDC) realizó trabajos de limpieza desde horas tempranas del día, también en el mercado La Isla, y el mercado Álvarez, donde hasta el momento no se reportaron muchas pérdidas ya que habían sacado la mercadería de manera preventiva.
En Tegucigalpa, varios centros educativos son utilizados para albergar afectados por la depresión tropical Eta.
Las fuertes lluvias han provocado deslizamientos y derrumbes en diferentes colonias de Tegucigalpa, entre ellas: Villanueva, El Reparto por Arriba, Nueva Suyapa, el Barrio la Bolsa, entre otros. En el Instituto Central Vicente Cáceres se albergan un total de 72 personas, entre ellos, niños y adultos mayores en su mayoría.
Los cuerpos de socorro, la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) y los Comité de Emergencia Municipal (Codem) desde horas de la mañana se apersonaron a entregar víveres, colchonetas y equipos de bioseguridad, así lo confirmó Marbella Rivas, coordinadora del programa Guías de Familia quien también es encargada de la organización de albergue en el centro educativo.
También informó que este Instituto no tiene un límite de capacidad por atender familias afectadas por las lluvias. “Si vienen más personas se recibirán porque el espacio es amplio, tenemos acondicionado y también se fumigó para evitar contagios de dengue”, explicó.
Rivas, de igual manera ha denunciado a los directores de la escuela República de Brasil y la escuela Club de Leones quienes se negaron a abrir las puertas para albergar a estas familias que en horas de la noche y madrugada tuvieron que salir de sus casas.
Mientras tanto en la Nueva Suyapa, Marta Leticia Alvarado de 42 años y madre soltera de tres menores de edad y dos jóvenes, relató a Contracorriente el miedo que vivió ayer en horas de la noche, luego de que el muro de su casa cediera ante las lluvias provocando que saliera con toda la familia de manera inmediata a albergarse en la escuela 17 de Septiembre de la misma localidad.
“Mi casita quedó inservible, tuve mucho miedo. Al escuchar el estruendo al caer el muro yo salí corriendo al ver que mi casa estaba en el aire sentí tanta angustia que solo me puse a llorar”, relató.
En este centro educativo están 90 personas albergadas y aunque se ha llevado ayuda por parte de las instituciones del Estado, los encargados de este centro escolar han pedido a los hondureños colaborar con comida, agua, equipos de bioseguridad, suéteres, cobijas, pañales, papel higiénico y todo lo que consideren útil, según Gloria Sánchez, encargada de la institución.
La Alcaldía Municipal, es la encargada de realizar pruebas rápidas para la detección del Covid-19 en los lugares instalados como albergues donde se aproxima que hay en total unas 720 personas, 402 adultos y 318 niños, pero en los albergues de la colonia Betania solamente se han realizado un total de 100 pruebas, de las cuales 8 salieron positivas. La misma alcaldía ha asegurado que estas personas ya se encuentran en aislamiento.
En la escuela 17 de septiembre de Nueva Suyapa, algunas personas damnificadas informaban que a las 98 personas que se encuentran ahí se les realizó la prueba rápida por medio de una brigada médica que fue llevada por otro medio de comunicación, y que todas las pruebas salieron negativas.
Mientras tanto en el Instituto Central, se encuentran equipos de las brigadas médicas Anticovid, donde de igual manera se realizaron las pruebas rápidas, saliendo todas negativas. A la vez se realizaron otras evaluaciones médicas ya que “muchos menores de edad han presentado malestares estomacales, mientras tanto los adultos mayores necesitan monitoreo porque muchos son hipertensos, otros sufrieron lesiones al salir de sus casas”, dijo Rolando Sorto, médico de la zona.
Sorto sostiene que no se debe de descuidar el tema de la bioseguridad, ya que la pandemia continúa, además estas catástrofes arrastran otras enfermedades como influenza y dengue, además la falta de agua potable en los albergues puede ocasionar problemas intestinales en la población.
Actualmente, los lugares más afectados por la tormenta están en el valle de Sula, lugares que donde las personas han permanecido más de 16 horas en muchas ocasiones, en los techos de sus casa, esperando ser rescatadas. La zona centro y sur del país también ha entrado en un riesgo mayor tras la crecida del río Choluteca.