La «recuperación» del himno nacional de Karla Lara

La interpretación de la cantante, periodista, activista y defensora de derechos humanos, Karla Lara, de su canción  «Lampo de cielo» en un evento celebrado en Casa Presidencial revivió un debate que inició cuando compuso y entonó esta canción durante las movilizaciones contra el golpe de Estado de 2009. En «Lampo de cielo», Lara ordenó y agregó algunas líneas del himno nacional de Honduras, y según ella, a través de este acto se recuperó este símbolo de «manos de los golpistas». Catorce años después sigue siendo señalada como una transgresión a un símbolo patrio pero siguió abriendo debates sobre la identidad nacional y los símbolos nacionales. 

 

Texto: Persy Cabrera

Con reportes y portada de Fernando Destephen


El 30 de agosto en Casa Presidencial no fue la primera ocasión en la que Karla Lara cantó «Lampo de cielo», una canción que compuso hace 14 años en el contexto del golpe de Estado de 2009, en ella ordenó y agregó algunas líneas del himno nacional —que escribió Augusto C. Coello y musicalizó Carlos Harthling— para «recuperar» el símbolo que estaba «en manos de los golpistas», según explicó Lara en una entrevista a Contracorriente.

La interpretación de esta canción que se volvió viral en redes sociales ocurrió en Casa Presidencial en el marco del Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas, evento en el que el Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (Cofadeh) entregó una propuesta de ley a la ministra de la Secretaría de Derechos Humanos, Natalie Roque. Esta interpretación volvió a generar debate entre la población hondureña sobre la modificación a símbolos nacionales, la libertad artística y de expresión y la representatividad de la hondureñidad en los símbolos patrios. 

 

Según el escritor Óscar Estrada, además la interpretación de Lara se viralizó en un momento en el que «dentro de los detractores nadie está realmente interesado de tener una discusión honesta, histórica social o sociológica» sobre la canción, por el «ambiente sumamente polarizado» que se vive.

 

Estrada acompañó en 2009 las masivas movilizaciones en las que Lara entonó esta canción y declaró que para entablar este debate, de manera inicial hay que preguntarse: «¿qué son los símbolos? ¿Qué representa un símbolo como el himno nacional?». El escritor hondureño respondió enseguida que estos símbolos «son proyectos políticos de una clase determinada que en algún momento deciden establecer una imagen específica sobre lo que en este caso es la hondureñidad».

 

Karla Lara expresó que no tiene intenciones de cambiar al himno, si no de «recuperarlo» para el pueblo porque parte de su letra «no tiene tienen nada que ver ni con nuestra realidad ni con el genocidio del que fue objeto nuestro pueblo para colonizarlo».

 

El poeta y gestor cultural, Salvador Madrid, dijo a Contracorriente que toda la controversia alrededor de Karla y esta canción corresponden a un «error de percepción y es un error de lenguaje» pues —de acuerdo con él— ella no es una institución del Estado que pueda hacer una modificación a este símbolo nacional. De acuerdo a Madrid, la posición de artista de Lara le permitió hacer una «reinterpretación» del himno nacional y agregó que este es «un procedimiento normalizado dentro del mundo del arte y dentro del arte contemporáneo especialmente».

 

Óscar Estrada explicó que estas reinterpretaciones son válidas pero que es trabajo del actual Gobierno —si así lo desean— el «extrapolar o lograr que la población en general asuma y adopte como nacionales también los símbolos que se crearon desde el espacio de resistencia y también son símbolos nacionales, porque también representan a un sector importante de la nacionalidad».

 

Recomendamos: «La memoria y la discusión de “Berta soy yo”, un documental de Katia Lara»

 

Desde la perspectiva de Estrada esto se sumó a la percepción de «un gobierno que está sumamente dañado a nivel de imagen» y agregó más cuestionamientos al debate sobre la representatividad de los símbolos nacionales preguntando: «¿quién decidió que Trinidad Cabañas fuera un prócer y no Guardiola? ¿Quién decide qué se olvida y qué se mantiene en la historia?».

 

Las acusaciones de plagio, irrespeto o de «profanar» símbolos patrios

 

Karla tiene 14 años escuchando el mismo debate y recordó cuando —por ejemplo en 2010— «[Rodrigo] Wong Arévalo incluso hizo un editorial con el mismo discurso que están diciendo ahora, en HRN también hubo un programa muy descalificador con ese mismo tipo de acusaciones, “que estamos violando los sacro-santos símbolos patrios”». 

 

De esa reacción hace años comparada a la posterior de su participación el 30 de agosto en Casa Presidencial, Lara consideró que en la actual ha sido «con el tono más alto». 


El escritor Juan Ramón Martínez expresó en una columna que la indignación posterior a la presentación de Lara en Casa Presidencial es «justificada» pues valoró «Lampo de cielo» como una versión «alterada, irrespetuosa e indigna». También acusó a la cantautora hondureña de plagiar la letra escrita por Augusto C. Coello y dar una explicación «insuficiente» a la «modificación de la estructura musical de la obra de Carlos Harthling».

Algunos usuarios de la red social X, señalaron la canción como una «falta de respeto» a los símbolos patrios y acusaron a Lara de «mancillar» o «profanar» símbolos patrios. En esta misma red social, también circuló una supuesta denuncia a Karla Lara ante el Ministerio Público en la que se describió que en la entonación de  «Lampo de cielo», Karla Lara «de manera notoria ultrajó el himno nacional».

 

En la misma columna en la que Juan Ramón Martínez acusó de plagio a Karla Lara, también hizo referencia a una denuncia en el Ministerio Público, realizada de acuerdo a Martínez por Rosa María Muñoz.

 

Por una parte, Lara estimó que esto fue una cortina de humo para que «no hablemos de las otras cosas que realmente son importantes, el país sigue con una precariedad enorme en términos de justicia, la elección del fiscal General y adjunto […]». Y por otro lado, la cantautora valoró como una campaña de desprestigio, las acusaciones contra el Gobierno de Xiomara Castro de querer modificar los símbolos patrios pues «no hay ninguna intención», explicó Lara.

 

La Secretaría de las Culturas, las Artes y los Patrimonios de los Pueblos de Honduras (Secapph) denunció intentos por criminalizar a Karla Lara  y la incitación a «la acción penal del Ministerio Público» contra ella. Además la secretaría, dirigida por Anarella Vélez Osejo, pronunció a través de un comunicado que «Lampo de cielo» es una expresión respaldada por el «principio fundamental de libertad de expresión» y que no puede ser censurada.


En la entrevista que Karla Lara brindó a Contracorriente también admitió ver la faceta positiva del debate alrededor de «Lampo de cielo», y esta es el «el aliento de por qué debemos seguir insistiendo en la contracultura» porque según Lara, hay un hueco que llenar en el «falso patriotismo»  que ha dado a la población  una convicción en la que «la pertenencia geográfica está determinada por otros intereses y no por los de la gente», desdibujando, según la defensora de derechos humanos, «las desigualdades profundas que ocurren en este territorio que se llama Honduras».

Sobre

Persy Cabrera nació en Tegucigalpa en 1997. Es graduado de bachiller técnico en electricidad del Instituto Técnico Saúl Zelaya Jiménez y cursó media ingeniería eléctrica en la UNAH antes de pasarse a estudiar periodismo. Actualmente es periodista cultural en Contracorriente. Le gusta el cine, las series, el anime, el manga y los libros. Practica fútbol y es entusiasta del deporte en general.

Comparte este artículo

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.