Fotografía y texto: Amilcar Izaguirre
De los 55 años que Margarita Murillo vivió, 42 de ellos los pasó en constante lucha por el acceso y distribución justa de la tierra, en especial para las mujeres campesinas. Fue una de las fundadoras de la Central Nacional de Trabajadores del Campo (CNTC), esto le provocó vivir un tiempo en el exilio. Sus últimos años los dedicó a coordinar el Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP) en la zona norte. En el 2014 fue asesinada mientras trabajaba la tierra por la cual luchó en la comunidad de El Plantón, Villanueva, Cortés. Nueve años después, su caso continúa en la impunidad.
El 27 de agosto se realizó un homenaje en la ciudad de San Pedro Sula en memoria de Margarita Murillo, en el que se presentó un mural en el que se puede apreciar el rostro de Murillo junto a una reseña de su lucha. La pintura está ubicada en el muro perimetral de Ciudad Mujer en San Pedro Sula y fue creada por el pintor Demmys Méndez. «Espero que en el futuro ese tipo murales no sean necesarios y que sea el arte una herramienta de lucha», comentó Méndez
Margarita Navarro, coordinadora Interinstitucional Contra la Violencia hacia la Mujer en El Progreso, Yoro, quien trabajó de cerca por varios años con Margarita Murillo, la describió como una mujer de mucho carácter y directa para decir las cosas. «Nosotros siempre decimos que si a Margarita le hubieran llegado de frente, no la matan, los que la asesinaron le llegaron por la espalda porque sabían cómo era ella, una auténtica campesina», comentó Navarro.
En los años 80, cuando Centroamérica vivía un proceso de convulsión por la guerra fría, recordó Navarro que en Honduras encarcelaban a los luchadores y los tildaban de comunistas. «En 1987 Margarita fue secuestrada, torturada y hasta le fracturaron la columna los llamados escuadrones de la muerte, liderados por (Gustavo) Álvarez Martínez, por tal razón tuvo que salir del país exiliada y volvió en los años noventa para retomar la lucha campesina», dijo Margarita Navarro.
El 10 de octubre del 2014 también asesinaron a la coordinadora de la Fiscalía de Delitos Contra la Vida, Marlene Banegas y a la fiscal Patricia Eufragio, estas dos mujeres estaban investigando la muerte de Margarita Murillo. Nueve años después, el Foro de Mujeres por la Vida junto a otras organizaciones se han dispuesto luchar para que se conozca la verdad y se haga justicia.
Según datos del Foro de Mujeres por la Vida, hasta el 24 de agosto de este año, Honduras registró 288 casos de femicidios incluyendo 46 mujeres que murieron en la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS), ubicada en la aldea Támara. Además, desde el 2013, se registraron cerca de 8000 femicidios. Margarita Navarro dijo que el 95 % de esos casos están en la impunidad.
«Honduras tiene una deuda con estos casos, nosotros como grupo de mujeres decimos que el Estado, se convierte en feminicida al ser cómplice por quedarse callado y no investigar», comentó Navarro.
Keyla Canales, abogada del Equipo de Reflexion, Investigacion y Comunicación (ERIC-SJ), explicó que, en el caso de Margarita, han habido muchas irregularidades en las investigaciones, sobre todo el asesinato de la fiscal que tenía asignado su caso. Canales añadió que hasta la fecha no hay un requerimiento presentado ante la fiscalía sobre el caso de Margarita Murillo y que en varias ocasiones han solicitado acceso a los expedientes de estas investigaciones y se los han negado con la excusa de que están protegiendo la investigación previo a presentar un requerimiento.
El 30 de agosto venció el plazo para el elegir el nuevo fiscal general y el fiscal adjunto de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) debido a que no hubo consenso entre los diputados, ante esto, la abogada Canales dijo que como organización de derechos humanos consideran que quien asuma este cargo tiene el reto de hacer una revisión total de cómo está funcionando el Ministerio Público que actualmente reporta altos índices de mora fiscal, que en casos de mujeres y de personas defensoras de derechos humanos sobrepasa el 90 %. «Eso indica que no está funcionando el Ministerio Público, hay que hacer una revisión presupuestaria, porque los fiscales también trabajan con las uñas», comentó Keyla.