A pesar de que las autoridades hondureñas han manifestado públicamente que existe un contrato para la adquisición de la vacuna rusa Sputnik V, la Secretaría de Salud negó a Contracorriente la información del contrato solicitado vía Ley de Acceso a la Información Pública, aduciendo que la vacuna está en proceso de adquisición.
Texto: Lizz Mejía
Fotografía: Martín Cálix
En los primeros días de marzo de 2021, el Gobierno de la República dio a conocer que se había llegado a un acuerdo de compra de la vacuna con la Federación Rusa. Según las notas de prensa de la Presidencia y la Secretaría de Salud, el Estado de Honduras planificó entre febrero y marzo la adquisición de 4,2 millones de dosis de la vacuna Sputnik V, que serían utilizadas para inocular 2,1 millones de hondureños, un poco menos de la mitad de los ciudadanos elegibles para la inmunización.
En una nota de prensa publicada el pasado 9 de marzo en portales oficiales del Gobierno, se da a conocer que Alexander Nikolaevich Khokholikov, embajador ruso concurrente para Honduras, confirmó que existe contrato y que este llegaría a Honduras entre el 9 y 10 de marzo, ya firmado por Rusia y para formalizar la compra de la vacuna contra la COVID-19.
En esa misma nota el presidente Juan Orlando Hernández declaró: «el embajador de Rusia, Alexander Nikolaevich Khokholikov, me dijo: “presidente, ya vienen los parámetros del acuerdo firmados”, y los equipos de las secretarías de Salud y Finanzas, así como los veedores sociales, revisaron y enviaron el documento a Rusia. Estamos esperando que entre hoy y mañana se confirme la llegada del cronograma de los lotes con la respectiva rúbrica».
Solicitamos el contrato a las secretarías de Salud y Finanzas. El día que se ingresó la solicitud de información se obtuvo respuesta de la oficial de información pública de la Secretaría de Finanzas, quien aseguró mediante un correo electrónico: «la institución responsable de proporcionar lo referido es la Secretaría de Salud, es por ello que le proporciono los datos del oficial de información pública de dicha entidad a fin de que le brinden lo descrito».
Al no recibir respuesta de la Secretaría de Salud, se solicitó la información a la Agencia de Regulación Sanitaria. Esta institución respondió a través de correo electrónico «que esta institución no tiene competencia ni facultades legales para comprar vacunas Sputnik V. En ese sentido, no cuenta con contratos de compra de ese producto».
Finalmente, el 22 de marzo, la oficial de información pública de la Secretaría de Salud respondió a la solicitud, enviando un archivo en Pdf que contenía una nota con fecha del 15 de marzo de 2021, indicando que no puede proporcionar el contrato ya que «esta Secretaría de Estado está haciendo el proceso de adquisición de la misma», firmada por la abogada Sara del Carmen Álvarez Sánchez, secretaria general de esta institución.
Hasta la fecha, se desconoce cuándo llegará a Honduras la vacuna desarrollada por el Instituto Gamaleya de Rusia, y por la respuesta de la Secretaría de Salud está en duda la existencia de un contrato. En una entrevista televisada, el titular de la Secretaría de Finanzas, Marco Midence, aseguró que todavía no se ha hecho desembolso alguno y agregó que fueron informados que la capacidad de producción de la vacuna aumentó pero no han dado el número de lote que será enviado al país.
Durante la pandemia, las instituciones públicas no han sido transparentes en el manejo de la emergencia. Vladimir Mendoza, comisionado del Instituto de Acceso a la Información Pública (IAIP), comentó a Contracorriente en el mes de noviembre, que durante el 2020 se han remitido alrededor de 400 casos a la Procuraduría General de la República por negación de información por parte de instituciones públicas, pero el IAIP no tiene el recurso humano y técnico para llevar todos estos casos legales.
No es la primera vez que la Secretaría de Salud nos niega información que debe ser pública. El 18 de junio de 2020, este medio de comunicación solicitó mediante el Sielho, los resultados de la prueba de detección de COVID-19 realizada al presidente Juan Orlando Hernández, ya que el mandatario, en una comparecencia de prensa, dio a conocer que él y su esposa habían recibido los resultados de las pruebas y el resultado era positivo. Después de esto, la oficina de la Presidencia de la República emitió un comunicado reforzando las declaraciones e indicando que la prueba positiva era una PCR para la detección del virus. Después de seis meses y un proceso de revisión interpuesto por el periodista Fernando Silva, colaborador de este medio, la Secretaría tuvo que hacer pública esta información.
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En esta ocasión, Contracorriente también recurrió al recurso de revisión, ya que según las declaraciones brindadas en conferencias de prensa y entrevistas dadas a medios, el contrato ya está firmado por ambas partes. Además, el documento solicitado contiene información de interés nacional, puesto que la llegada y la aplicación de la vacuna son un paso para lograr la inmunidad de rebaño y disminuir la cantidad de casos que llegan a los ya saturados hospitales del sistema público. Hasta el momento, Honduras comenzó el proceso de vacunación inmunizando a 53 574 personas del personal sanitario gracias a una donación del gobierno de Israel de 5000 dosis de la vacuna Moderna y la donación del programa COVAX de 48 000 dosis de la vacuna AstraZeneca. Cabe señalar que los viales que contenían la vacuna Moderna traían dosis extra, por lo que se pudo vacunar a otros 574 ciudadanos que laboran en los hospitales del país.