En el espacio La Entrevista de Canal Once, el candidato a la presidencia por el Partido Liberal, Luis Zelaya, habló de su plan de gobierno, el que centró en su apuesta por el desarrollo maquilero a través de los Parques Agroindustriales.
Durante su comparecencia el candidato especificó el funcionamiento de estos parques en varios países de América Latina, además alabó la inversión extranjera a través de la industria maquilera en el país. En su discurso abordó muy poco el tema laboral, específicamente la situación de violaciones a los derechos que existen en las fábricas que funcionan en Honduras.
Bajo esa dinámica el político prometió el cielo y la tierra a los electores y lo hizo a base de datos. Veamos cuáles son verdaderos o falsos.
Hacer clic en el + para comprobar la frase.
“El principal problema de los hondureños es la falta de oportunidades de empleo”
Verdadero. El Sondeo de Opinión Pública del Equipo de Reflexión, Investigación y Comunicación (Eric), correspondiente al año 2016, destaca que un 19.5% de la población hondureña destacó como principal fracaso del gobierno y problema de país la situación económica, entre ella el desempleo, alto costo de la vida y pobreza. A este le sigue la violencia e inseguridad, con un total del 17.1%.
“El modelo de maquilas se concentró desde los años 90 en un solo departamento: Cortés”.
Verdadero. Según datos de la Asociación Hondureña de Maquiladores, en la actualidad hay más de 300 maquilas en el país, la mayoría está concentrada en el departamento de Cortés, específicamente en San Pedro Sula, Choloma y Villanueva.
“La inversión extranjera directa cayó 16% en 2015, 2016 y el 2017 la proyección es que va caer”.
“Casi el 60% son madres jefes de familia”
Verdad a medias. Según datos del Instituto Nacional de Estadísticas hay más de 1.9 millones de hogares, de los que aproximadamente el 33.6% son liderados por mujeres, es decir: unas 669,360 hondureñas están al frente de sus familias.
Sin embargo, en Honduras el trabajo en casa que realizan las mujeres no es remunerado, así tampoco entra en las cifras el trabajo informal que muchas mujeres realizan desde sus hogares para el sostén del mismo.