El alcalde de San Pedro Sula, Roberto Contreras, mencionó en un evento público que en su primer año de administración no había necesitado transferencias del Gobierno Central y en comunicación con Contracorriente afirmó que «no eran pordioseros» y que «con mucho gusto» regresa la transferencia de 21 millones de lempiras destinada por el gobierno central a esta alcaldía para el año 2022.
Texto: Allan Bu
Fotografía: Amílcar Izaguirre
En un cabildo abierto realizado el pasado el 28 de enero donde se presentó el informe del primer año de Gobierno en la Municipalidad de San Pedro Sula, el alcalde Roberto Contreras mencionó que «en su administración no habían necesitado de las transferencias del Gobierno», pero más allá de no necesitarlas, Contracorriente confirmó, de la voz del propio jefe edilicio, que la Alcaldía sampedrana buscó la forma de regresar una transferencia de 21 millones de lempiras realizada por el Gobierno Central en el año 2022.
Lo anterior no deja de ser extraño por la serie de problemas económicos que aquejan a la segunda ciudad más importante del país, pero el alcalde justifica su intención de regresar la transferencia. «Con mucho gusto quisiera regresarlos porque no es justo que el año 2022 el Gobierno Central le haya asignado a la Municipalidad de Tegucigalpa 445 millones de lempiras del presupuesto y a nosotros ningún centavo. Tampoco es justo que en el presupuesto del 2023, se le asigne casi 300 millones más al señor Aldana (alcalde de Tegucigalpa) y a San Pedro Sula no se le asigne ningún centavo», se quejó Contreras.
El reclamo del alcalde radica en que el Gobierno Central está obligado por la Constitución de la República a realizar transferencias anuales a la municipalidades, de estos fondos forman parte los 21 millones que el alcalde quiere regresar, pero él aduce que a Tegucigalpa aparte de las transferencias de ley se les asignaron más de 700 millones de lempiras y a San Pedro Sula, nada.
En el presupuesto de la República para el 2023 publicado en el portal de la Secretaría de Finanzas, aparece que el Gobierno dirigido por Xiomara Castro enviará a las 298 municipalidades en todo el país 7,013 millones de lempiras. Según un estudio realizado por la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), desde el 2006 hasta el 2019, el Gobierno Central había trasladado a las municipalidades 48,449 millones de lempiras. Es ley de la República que el 11 % del Presupuesto General —actualmente de 392,000 millones de lempiras— debe ser transferido a las alcaldías.
En la reformulación del presupuesto realizada en el 2022 por la actual administración en el artículo 191 se indica que estos fondos deberán ser utilizados de la siguiente forma: 35% a proyectos de inversión social que mejoren las condiciones de vida de la población, con atención especial en los grupos vulnerables como niñez, juventud, migrantes retornados y personas con discapacidad, las alcaldías podían utilizar estos fondos para hacerle frente a la pandemia de Covid-19. Se contempla también un 20% a fortalecer el tejido social, 20 % dirigidos a gastos propios de la administración municipal, 10% a mejorar el clima de inversión en el municipio, 5% a la mujer, 5% en programas varios, 1% en transparencia municipal y en el inciso 8 del artículo menciona que el resto se debe destinar a la inversión.
Las alcaldías deben presentar trimestralmente la liquidación de estos fondos a la Secretaría de Gobernación y Justicia.
El jefe edilicio le dijo a Contracorriente a través de un audio enviado por una aplicación de mensajería que «los sampedranos no vivimos de dádivas, ni de migajas del Gobierno» y afirmó que iba a publicar un informe en el cual se registra una deuda que la ministra de Finanzas Rixi Moncada le está cobrando a la Municipalidad de San Pedro Sula y que por eso no le realiza ninguna transferencia. A la fecha de esta publicación, el alcalde no ha hecho público tal informe. «Es más, esa única transferencia (21 millones) que mandaron viene del Gobierno del Partido Nacional, Libre no le ha mandado ni un centavo a San Pedro Sula y no estamos tampoco de pordioseros», dijo. Desde la Secretaría de Finanzas se confirmó a este medio que en octubre de 2022, la alcaldía sampedrana recibió 21 millones de lempiras por concepto de transferencia.
También se le consultó al alcalde capitalino Jorge Aldana si su administración ha recibido más de 400 millones de lempiras desde el Gobierno Central, fuera de las transferencias. Vía mensaje de whatsapp respondió que el Distrito Central recibió aproximadamente 130 millones en transferencias municipales que corresponden según la ley y hubo «un caso excepcional que son las viviendas de la Colonia Guillén (hubo un deslizamientos), en el cual el Fondo Hondureños de Inversión Social (FHIS), en el marco de la emergencia, nos transfirió 120 millones para ejecutar».
Aldana mencionó que existen situaciones en donde se «coordinan entregas de los recursos de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), pero no son fondos municipales, son recursos del Gobierno Central, nosotros ayudamos a coordinar la entrega con los líderes comunitarios». Se intentó constatar la información brindada por el jefe edilicio capitalino en el portal de transparencia de la Municipalidad del Distrito Central, pero el enlace enviaba el mensaje: «not found».
De acuerdo con el decreto 157-2022, sobre el Presupuesto General de la República del año anterior, las transferencias municipales serán distribuidas de la siguiente forma: el 50 % del monto será distribuido de forma equitativa a todas las municipalidades; el 20 %, por mayor población proyectada en el último Censo de Población y Vivienda y el 30 % de acuerdo con la población pobre de cada municipio. Siendo San Pedro Sula y Tegucigalpa, las ciudades más pobladas del país, hay que mencionar que la capital recibió 100 millones de lempiras más por concepto de transferencia.
Contreras manifestó que con la administración austera que se está realizando en la municipalidad, esta no necesita «ni un lempira del Gobierno Central», pero advirtió que Libre seguramente querrá hacer política dentro de dos años en San Pedro Sula «¿Quién va a votar por ellos si nos tienen marginados?» preguntó el edil.
Hay pequeñas alcaldías en todo el país que sobreviven de las transferencias realizadas por el Gobierno. La gobernadora política de Cortés, Alexa Solórzono, dijo que en una reunión de alcaldes del departamento salió a relucir el caso de San Pedro Sula como el único que rechazó el apoyo gubernamental. «Es pilas (el alcalde) para hacer negocios, pero la administración de la municipalidad es diferente porque no hay que esperar ganancias y los tributos del pueblo es para regresarlos con obras sociales y para velar por los desfavorecidos», dijo Solórzano, quien antes de ser nombrada Gobernadora era la candidata a la vicealcaldía por Libre, pero cedió su posición tras el acuerdo electoral con Contreras.
Solórzano sostiene que ese discurso del alcalde Contreras en el cual menciona que ese mensaje que «con el dinero que tenemos aquí no ocupamos dinero del Gobierno Central» puede cambiar cuando en los barrios comiencen a exigir las mejoras prometidas por este nuevo Gobierno, «espérese que la gente se organice y le exija mejoras en la comunidad», dijo.
San Pedro Sula, también conocida como la ciudad industrial, tiene entre sus principales problemas, el asentamiento de más de 20 mil familias en 20 bordos de la ciudad. Otro es que el comercio informal se ha adueñado de las principales vías del centro de la ciudad, sin una solución a la vista. El mes pasado vendedores quemaron llantas ante la Municipalidad ante el solo rumor que serían desalojados. Ambos problemas tienen su solución en reubicar a habitantes de los bordos y vendedores, pero en ambos casos se necesita millones de lempiras, que la Municipalidad de San Pedro Sula no tiene.
Lo que sí tiene la Municipalidad son deudas, el vicealcalde Omar Menjívar confirmó a Contracorriente que recibieron las arcas municipales con grandes compromisos financieros. A proveedores diversos se les debía 1,000 millones, con los bancos todavía hay una deuda de más de 3,000 millones, al Cuerpo de Bomberos se les debía 100 millones y a la empresa de recolección de basura Sulambiente cerca de 400 millones.
Menjívar en diciembre del 2022, casi un año después de haber asumido el poder, reconoció que «los problemas fundamentales de San Pedro siguen siendo los mismos, están intactos y algunos casos se han incrementado. Hay que tener conciencia de eso, como es un hombre inteligente (Contreras) creo que va a rectificar y reorientar la Municipalidad.»
Un alcalde polémico
Ha transcurrido poco más de un año desde que Roberto Contreras asumió como alcalde municipal en San Pedro Sula, al norte de Honduras. Recibió la mayor votación de un alcalde electo en la historia de esta ciudad, pero su administración ha sido marcada desde el inicio por las disputas internas con el Partido Libertad y Refundación (Libre), institución con la que hizo alianza para sacar al nacionalista Armando Calidonio del poder.
Este año ha sido de sobresaltos mediáticos para Roberto Contreras. Desde que dio la instrucción ordenando el cierre de una heladería que vendía productos con forma de penes o de vulvas hasta la acusación de golpista que hizo a su vicealcalde Omar Menjívar. Ha enfrentado protestas callejeras, ha sido confrontado por la base de Libre, por los vendedores del mercado Guamilito y por los vendedores del sector informal.
Y aún con todo lo anterior, el alcalde sampedrano siempre encuentra la forma de sorprender. En el cabildo abierto en el que presentó su informe, el alcalde felicitó a su antecesor y actual regidor municipal, Armando Calidonio; se acercó a la mesa donde estaba Calidonio y le dio un abrazo. La imagen se hizo viral en redes y la mayoría de medios de comunicación hicieron eco de la noticia porque durante la campaña electoral de 2021, Calidonio -uno de los líderes del Partido Nacional- era constantemente señalado de representar intereses oscuros. En el escándalo, se recogió especialmente la frase de Contreras: «te felicito Armando, hiciste un buen trabajo».
En las Elecciones Generales de noviembre de 2021, Contreras y Calidonio fueron contendientes por la alcaldía sampedrana. El actual alcalde fue un ácido crítico de la administración de Calidonio, incluso en una entrevista con Contracorriente afirmó que lo más difícil de ser alcalde es que tenía que lidiar con su antecesor «quien ahora se las tira de abogado», dijo.
Durante su comparecencia en el cabildo abierto, Contreras también se abrazó con el vicealcalde Omar Menjívar a quien en diciembre del 2022 acusó de querer darle «golpe de estado», luego que la Unidad Fiscal Especializada Contra Redes de Corrupción (UFERCO) iniciara una investigación en la alcaldía de San Pedro Sula sobre la forma cómo de adjudican los contratos.
Menjívar le explicó a Contracorriente que las pesquisas realizadas por los fiscales, incluyendo la entrevista a un testigo protegido, provocaron la reacción del alcalde, pero que hasta el momento no hay ninguna acusación ni contra el alcalde ni contra nadie, lo que es verídico es esas investigaciones abrieron un nuevo episodio de la confrontación entre Contreras y la facción del Partido Libre.
«El abrazo de Judas»
A los seguidores de Contreras y la militancia de Libre no les cayó bien el abrazo que le dio Contreras al exalcalde y ahora regidor Armando Calidonio. La abogada Alexa Solórzano dijo «cómo carajos vas a decir felicidades a su gestión cuando en la Aldea El Carmen, tienen el crique encima, cuando los niños en Asentamientos Humanos caminan en lodo porque las aguas negras pasan por ahí y los niños del Merendón están estudiando en una galera».
Contreras, a través de un audio explicó a este medio de comunicación, lo que para él significó ese abrazo con el exalcalde Calidonio. «Hagamos un poco de historia, el señor Armando entró a un cabildo abierto con medidas extremas de seguridad, las cuales yo no ordené. Entró totalmente indiferente y sin saludar ni al alcalde ni a los compañeros corporativos, entonces después que hago la presentación de nuestro primer año de Gobierno, que es superior a los últimos 15 años de gobierno en la Municipalidad de San Pedro Sula, le digo “hiciste las cosas bien”, eso se llama sarcasmo político. Lástima que las personas no lo entienden» se lamentó el alcalde.
«Luego, ante la indiferencia, que ni siquiera saludó a la mesa principal, yo hago lo mismo que hizo el Señor (Jesús) cuando recibió el beso de Judas después que lo había vendido por unas monedas de plata, y lo abrazo. Cada quien da lo que tiene en su corazón, yo tengo aprecio, amor, cariño, tolerancia para las personas», agregó.
A juicio del alcalde, el país no avanza porque cuando los políticos llegan al poder se encargan de pelear contra los que anteriormente estaban gobernando y este no debe ser el objetivo, «la lucha es sacar adelante una ciudad, sacar adelante un país sin andar buscando culpables sino soluciones».
«En ese mismo acto» — nos dice Contreras—«también llamé al señor Omar Menjívar, vicealcalde, quien me ha atacado en fiscalías y me ha sacado un montón de falacias y mentiras, le di un abrazo. Yo doy lo que tengo en mi corazón, por supuesto no puede dar amor aquel que no lo tiene», concluyó.
Los desacuerdos entre la corriente independiente de Contreras y el Partido Libre comenzaron apenas la alianza ganó las elecciones, pero el primer gran conflicto fue el despido de tres gerentes que habían sido nombrados por Omar Menjívar en cumplimiento del acuerdo de repartirse la administración municipal, que consta de 13 gerencias. Seis para Contreras, seis bajo la responsabilidad de Libre y una sería entregada al Partido Salvador de Honduras.
El alcalde afirmó que los gerentes despedidos no cumplieron con las metas establecidas para los primeros 100 días de gobierno municipal. Omar Menjívar asegura que eso es falso porque no había tal plan. «La paradoja es que en su informe de 100 días, (Contreras) destacó los logros de un gerente que despidió. Eso lo que comprueba es que el despido fue de carácter político, lo que quería el alcalde, tal como lo ha ido logrando, es conseguir el control absoluto del Gobierno sin tener un contrapeso», dijo.
Alexa Solórzano manifestó que al final, «él controla todas las gerencias» y que Omar Menjívar ha sido prácticamente apartado de las negociaciones que actualmente las están manejando «una de las regidoras del partido y (otra) en el Poder Legislativo, pero no puedo dar nombre». Esto da pie para pensar que al interior del partido Libre también hay una división.
La administración de San Pedro Sula está dividida en las siguientes gerencias: Gerencia de Infraestructura, Salud, Ambiente, Competitividad, Servicios Sociales, Prevención y Seguridad, Participación Ciudadana y Servicios Comunitarios, Legal, Administrativo, Desarrollo Humano, Finanzas, Tecnología y Deporte.
Un detalle que se debe pasar por alto en un gobierno comandado en el que se menciona mucho el enfoque de género es que las 13 cabezas que ayudan a Contreras a dirigir San Pedro Sula, son hombres. “Eso lo critiqué bastante”, nos dice la abogada Solórzano y agregó, “yo sé que no es responsabilidad de él reducir los femicidios (por ejemplo), pero no he visto campañas dirigidas a evitarlo. Siento que no ha habido eso y el tema de género hay que tomarlo con el debido respeto”.
Y no solamente fue este incidente, activistas de Libre realizaron protestas en contra de Contreras exigiendo trabajo y pidiendo la salida de empleados ligados al Partido Nacional. Omar Menjívar explicó que la actual administración ha tenido mucha dificultad para responder a la gente que pedía un empleo porque recibieron la Municipalidad prácticamente sin presupuesto para pagar prestaciones laborales y, como cierre, un día antes de entregar la silla municipal, Armando Calidonio despidió a 900 trabajadores que llegaron a reclamar sus derechos laborales en el segundo día del nuevo alcalde.
La última confrontación entre alcalde y vicealcalde de San Pedro Sula fue muy grave. Contreras acusó a Menjívar que le quería dar un golpe mediante una investigación que ha iniciado UFERCO en la alcaldía.«Son dos abogados que mientras yo estuve de viaje con un permiso de Corporación urdieron un plan malévolo y basado en falsedades, negándome el derecho a la defensa, para proceder a nombrar un testigo protegido», dijo Contreras.
El alcalde aseguró que se aprovechó de un viaje suyo a Alemania para intentar arrebatarle la Municipalidad y de esta forma entregarla a Menjívar y que a su vez este apoyaría con su partido al fiscal Luis Javier Santos para que se convirtiese en el próximo Fiscal General de la República.
@PartidoLibre está ejecutando Golpe de Estado denuncia alcalde de SPS, Roberto Contreras. @omar_menjivar vicealcalde por Libre estaría detrás del complot, asegura el edil, usando como brazo judicial al director de @UFERCO1 Luis Javier Santos, y detrás de ellos @XiomaraCastroZ pic.twitter.com/F1W2p80v2p
— ultimahora.hn (@UltimaHoraHn) November 18, 2022
Menjívar, quien nos atendió en una oficina que en ese momento no tenía climatización, explicó que la Fiscalía ha iniciado una investigación sobre un grupo que opera los negocios en la alcaldía, «ha manejado el monopolio de los más jugosos contratos desde los tiempos de Óscar Kilgore, un grupo que metió en problemas a Kilgore, que lo hizo ir a situaciones de juicios penales y que lo hicieron estar preso varias veces», dijo.
En 2008, el alcalde nacionalista Óscar Kilgore(2002-06) fue encontrado responsable de los delitos de abuso de autoridad y malversación de caudales públicos. Fue capturado y liberado. En 2015 fue nuevamente acusado y no pudo justificar un capital de 8,9 millones de lempiras y fue enviado a prisión. En el 2018 fue absuelto.
«Ese mismo grupo sigue manejando los negocios, tiene una capacidad de maniobra y maquinación que le garantiza quedarse con los contratos más jugosos, la Fiscalía está haciendo esa investigación, yo tengo interés que esa investigación se lleve a cabo y que se culmine con éxito y que se libere a la Municipalidad de la influencia de esa mafia porque incluso al alcalde los pueden meter en problemas», dijo Menjívar.
Menjívar declaró que él había puesto en conocimiento del alcalde sus sospechas sobre la operación del grupo que manipula los negocios en la alcaldía. Se lo hizo saber a través de un memorando el 12 de mayo de 2022, «le puse en conocimiento la información que había recibido de la operación de ese grupo y el mecanismo que usaban para asegurarse los contratos. Le di copia a varios regidores y nunca se hizo nada, pero al menos ya tenía conocimiento, no puede decir el alcalde que desconocía eso», mencionó.
El vicealcalde menciona que lo realizado por la UFERCO es una «diligencia preparatoria» y que no hay ninguna acusación contra alguien.
Aunque el abrazo entre Menjívar y Contreras en la Cámara de Comercio fue después de esa entrevista, Menjívar dijo que en ese momento miraba complicado que se solventaran los desacuerdos en la Municipalidad.
Improvisación
Cuando comenzó su mandato, Roberto Contreras realizó una serie de promesas entre las que destacaba hacer un hospital materno infantil y comprar el edificio del antiguo Hotel Sula, cosa que no concretó.
Desde Libre, su otrora aliado, se considera que la administración de Contreras está en deuda con las esperanzas que ha puesto el pueblo de San Pedro Sula en la alianza y también se le acusa de no tener un plan de gobierno para atender a la segunda ciudad del país.
El vicealcalde Omar Menjívar, un conocido defensor de los derechos humanos, lamentó que el señor alcalde no tuviera un plan de gobierno, aunque lo reconoce como un hombre de muchas ideas, «pero se necesita tener orden y sistematizar esas ideas bajo una visión estratégica a largo plazo», afirmó.
Un empleado municipal que prefirió hablar desde el anonimato coincidió con Menjívar y afirmó que si tuviera que definir el primer año de Gobierno de Contreras y Libre, lo haría con la palabra «improvisación».
Menjívar dijo en descargo del alcalde, que esta administración tuvo un presupuesto y un plan operativo confeccionado por la administración anterior y esto dejó poco espacio de modificación. «Había poca posibilidad de maniobra a modo que quede mal con la población» dijo. Mencionó la deuda millonaria de más de 4,000 millones de lempiras y el despido de 900 trabajadores un día antes de recibir la alcaldía.
«Lo otro corresponde a nosotros» reconoció Menjívar, en referencia a la deuda de promesas que él considera tiene la actual administración con la población de San Pedro Sula . Acepta que se llegó al triunfo en las elecciones a través de un acuerdo electoral que tuvo como motivación más la necesidad de sacar a quienes estaban gobernando que una alianza pragmática. «Nos ganó la emoción y no nos preocupamos por afinar una alianza, de nuestra parte como Libre teníamos un Plan de Gobierno, quizás no era perfecto pero hicimos un esfuerzo por ofrecer a San Pedro Sula una propuesta que sirviera de guía para el Gobierno», reconoció.
En la presentación de su informe, el alcalde dijo que se había elegido un alcalde para elevar la vida de los habitantes del municipio y hacer un uso racional de los impuestos que pagan los contribuyentes, «eso hemos realizado este primer año y eso vamos a hacer estos próximos tres años».
Durante el primer año de Gobierno de Roberto Contreras, los sampedranos pagaron 2,786 millones de lempiras, según informó la administración actual se recaudaron 400 millones más que en el último año del mandato de Armando Calidonio.
La sola pretensión de regresar de 21 millones de lempiras en un país como Honduras genera preguntas. ¿No necesita recursos una ciudad con miles de familias viviendo en condiciones de pobreza? ¿No necesita dinero una ciudad asediada por la violencia? ¿Y la deuda heredada de más de 3,000 millones de lempiras?
Por otro lado, San Pedro Sula no tiene una casa de refugio para mujeres que sufren violencia doméstica y en las transferencias se contempla que el 5% va dirigido en apoyo a la mujer. El rechazo de 21 millones parece que profundiza la separación entre una facción de Libre y Roberto Contreras, alianza que derrotó a Calidonio, pero cuyos desacuerdos comenzaron antes de asumir el poder. En su discurso en la CICC, el alcalde manifestó. “Honduras necesita un presidente sampedrano”.