



Las pesadillas en la isla
«¡Inocente!».
Ovania escucha esa palabra salir de la boca del juez y grita, llora, se pega a ella misma y le pega a él, a Gilbert Reyes, el hombre que asesinó a su sobrina y sus amigas. Se pega y le pega fuerte; entonces despierta, con el eco de los golpes que le duelen en la piel.

Soberanía e inmortalidad, el tesoro perdido que los tecnofeudales buscan en Honduras
En una burbuja libertaria en la paradisíaca isla de Roatán, que está en Honduras, un país empobrecido, autoritario y violento de Centroamérica, surgieron Próspera e Infinita con el ambicioso y controvertido propósito de desafiar la muerte y ser el experimento libertario para probar un nuevo modelo de Estado. En Honduras ese nuevo modelo se llama Zona Especial de Empleo y Desarrollo (ZEDE), y después de ser aprobado por un expresidente convicto, ha sido condenado a la inconstitucionalidad. A pesar de esto, Próspera e Infinita son ahora el lugar intocable donde los más reconocidos millonarios de la tecnología invierten en tratamientos para prolongar la vida, para lograr la inmortalidad.


Las pesadillas en la isla
«¡Inocente!».
Ovania escucha esa palabra salir de la boca del juez y grita, llora, se pega a ella misma y le pega a él, a Gilbert Reyes, el hombre que asesinó a su sobrina y sus amigas. Se pega y le pega fuerte; entonces despierta, con el eco de los golpes que le duelen en la piel.

Soberanía e inmortalidad, el tesoro perdido que los tecnofeudales buscan en Honduras
En una burbuja libertaria en la paradisíaca isla de Roatán, que está en Honduras, un país empobrecido, autoritario y violento de Centroamérica, surgieron Próspera e Infinita con el ambicioso y controvertido propósito de desafiar la muerte y ser el experimento libertario para probar un nuevo modelo de Estado.