La dictadura de Bukele ya había comenzado para las salvadoreñas
No hay manera de escapar de las imágenes de Nayib Bukele en El Salvador. Como si se tratara del cantante favorito de adolescentes, no se puede ir por la calle sin encontrarse con alguien con una camiseta o un llavero con la cara estampada del presidente que este sábado inicia un segundo mandato, erosionando la poca democracia que se alcanzó a construir tras la guerra civil.