Argel, 9 dic (EFE).- Túnez subrayó este lunes la necesidad de garantizar la seguridad del pueblo sirio y preservar ese Estado como uno «unificado y plenamente soberano de manera que lo proteja del peligro de caos, fragmentación y ocupación» y rechazó «cualquier injerencia extranjera en los asuntos» de este país tras el derrocamiento como presidente de Bachar al Asad, anunció el Ministerio de Asuntos Exteriores.
Túnez instó a todas las partes sirias a «la cohesión y a dar prioridad al interés superior del país para preservar la seguridad, la independencia, la protección y la estabilidad de la nación, y para asegurar una transición política pacífica que preserve el Estado y su continuidad y satisfaga las aspiraciones del pueblo sirio solo», según un comunicado de prensa de la Cancillería.
El país magrebí expresó su «absoluta» solidaridad con el «hermano» pueblo sirio que «está unido al pueblo tunecino por lazos de parentesco profundamente arraigados en la historia, y su certeza en su capacidad para superar esta delicada circunstancia a fin de construir un futuro brillante para Siria».
El Ministerio recordó la firme posición de Túnez sobre la necesidad de distinguir entre el Estado, por un lado, y el sistema político existente en su seno, por el otro, considerando que su sistema político es un asunto «puramente» sirio elegido por su pueblo soberano «único que tiene derecho a la autodeterminación, libre de cualquier forma de intervención externa».
El domingo, el Ministerio de Exteriores de Trípoli aseguró que sigue con «gran interés» los rápidos acontecimientos en Siria y los «importantes» cambios y expresó su pleno respeto por la voluntad del pueblo sirio y sus aspiraciones de libertad y justicia.
El Ministerio libio afirmó su firme apoyo a la lucha «legítima» de los sirios contra «la tiranía, ve esta etapa como la culminación de un largo camino de lucha por dignidad y libertad» y expresó su deseo de que estos acontecimientos constituyan un «verdadero avance hacia la construcción de un Estado civil democrático que satisfaga las esperanzas de los sirios y logre justicia para todo el pueblo del país».
En la misma línea, el vecino Argelia transmitió el domingo su apoyo al «hermano» pueblo sirio e instó a un «diálogo entre todos los sirios de distintas sectas y componentes» para preservar la seguridad y estabilidad de Siria «lejos de la injerencia extranjera».
La Siria de la familia Al Asad, que gobernó el país desde 1971, colapsó este domingo a manos de los insurgentes liderados por el Organismo de Liberación del Levante (Hayat Tahrir al Sham o HTS, en árabe), que tomaron Damasco prácticamente sin resistencia tras apenas 12 días de ofensiva.
Este lunes la Embajada de Siria en Rusia confirmó que el depuesto presidente se encuentra en Moscú, donde habría recibido asilo junto con su familia.