United States vs
Fabio Lobo
Testigos Colaboradores
En 2004, CW-1 fue presentado a Ludwig Criss Zelaya Romero. Zelaya y Mejía Vargas proporcionaron escoltas armadas para vehículos de drogas; entonces CW-1 pagó al grupo de policías entre $70 000 y $100 000 por carga de cocaína.
En 2013, la DEA usó a CW-1 para apuntar a narcotraficantes y colaboradores, incluido Fabio Porfirio Lobo (reuniones con dispositivo de grabación).
Después de ser detenido en los EE. UU., Lobo se comunicó con él y acordó viajar a Haití para recoger las ganancias de las drogas/ Lobo conoció a CW-2 por Jorge Lobo.
Lider de los Cachiro
Dijo ser representante del narcotraficante mexicano “Chapo” Guzmán y usó un dispositivo de grabación durante una reunión en marzo de 2014 con Lobo. CW-2 lo presentó como el amigo del Chapo)
CW-2 presentó a CS-1; CS-2 y CS-3 a LOBO; CS-2 fue presentado como el “dueño de la Mercadería” de una carga de toneladas de cocaína.
Fuente confidencial actuando para la DEA
CW-2 presentó a CS-1; CS-2 y CS-3 a LOBO; CS-2 fue presentado como el “dueño de la Mercadería” de una carga de toneladas de cocaína.
Dijo ser otro de los representantes del “Chapo”.
En 2004, CW-1 fue presentado a Ludwig Criss Zelaya Romero. Zelaya y Mejía Vargas proporcionaron escoltas armadas para vehículos de drogas; entonces CW-1 pagó al grupo de policías entre $70 000 y $100 000 por carga de cocaína.
En 2013, la DEA usó a CW-1 para apuntar a narcotraficantes y colaboradores, incluido Fabio Porfirio Lobo (reuniones con dispositivo de grabación).
Después de ser detenido en los EE. UU., Lobo se comunicó con él y acordó viajar a Haití para recoger las ganancias de las drogas/ Lobo conoció a CW-2 por Jorge Lobo.
Lider de los Cachiro
Dijo ser representante del narcotraficante mexicano “Chapo” Guzmán y usó un dispositivo de grabación durante una reunión en marzo de 2014 con Lobo. CW-2 lo presentó como el amigo del Chapo)
CW-2 presentó a CS-1; CS-2 y CS-3 a LOBO; CS-2 fue presentado como el “dueño de la Mercadería” de una carga de toneladas de cocaína.
Fuente confidencial actuando para la DEA
CW-2 presentó a CS-1; CS-2 y CS-3 a LOBO; CS-2 fue presentado como el “dueño de la Mercadería” de una carga de toneladas de cocaína.
Dijo ser otro de los representantes del “Chapo”.
Políticos y Militares Mencionados
Fue diputado y gobernador por el Partido Nacional en el departamento de Colón.
Organizó una reunión en 2010 entre Fabrio Lobo, el entonces presidente Porfirio Lobo Sosa, el entonces diputado Oscar Ramón Nájera y CW-2. Durante la reunión, Lobo Sosa llamó al General Julían Pacheco Tinoco, quien llegó a ser ministro de Seguridad de Honduras.
Ex diputado por el Partido Liberal, condenado en Estados Unidos por delitos de narcotráfico.
En 2012, Fabio Lobo asistió a misión de narcotráfico marítimo que involucraba a Nájera Montoya.
Ex ministro de SOPTRAVI, ex alcalde de Tegucigalpa y miembro del Partido Nacional de Honduras.
Desempeñó un papel en las operaciones aduaneras hondureñas en Puerto Cortés; se reunió con Fabio Lobo, Nájera Montoya, otro oficial de aduanas y traficantes mexicanos de quienes Lobo recibió $50 000.
Ex diputado por el departamento de Colón, representante del Partido Nacional.
CW-2 organizó una reunión entre él y Lobo en 2013; durante la reunión Lobo llamó a Huberto Palacios Moya quien confirmó que la OABI planeaba embargar el zoológico joya grande y otros bienes
Oficial de la OABI (Oficina Administradora de Bienes Incautados)
General y ex ministro de Seguridad.
En 2014, Lobo presentó a CS-2 como amigo y le preguntó a Pacheco si podía ayudarlos con las “autorizaciones”, pero Pacheco se negó y salió de la habitación.
Coronel
Fue diputado y gobernador por el Partido Nacional en el departamento de Colón.
Organizó una reunión en 2010 entre Fabrio Lobo, el entonces presidente Porfirio Lobo Sosa, el entonces diputado Oscar Ramón Nájera y CW-2. Durante la reunión, Lobo Sosa llamó al General Julían Pacheco Tinoco, quien llegó a ser ministro de Seguridad de Honduras.
Ex diputado por el Partido Liberal, condenado en Estados Unidos por delitos de narcotráfico.
En 2012, Fabio Lobo asistió a misión de narcotráfico marítimo que involucraba a Nájera Montoya.
Ex ministro de SOPTRAVI, ex alcalde de Tegucigalpa y miembro del Partido Nacional de Honduras.
Desempeñó un papel en las operaciones aduaneras hondureñas en Puerto Cortés; se reunió con Fabio Lobo, Nájera Montoya, otro oficial de aduanas y traficantes mexicanos de quienes Lobo recibió $50 000.
Ex diputado por el departamento de Colón, representante del Partido Nacional.
CW-2 organizó una reunión entre él y Lobo en 2013; durante la reunión Lobo llamó a Huberto Palacios Moya quien confirmó que la OABI planeaba embargar el zoológico joya grande y otros bienes
Oficial de la OABI (Oficina Administradora de Bienes Incautados)
General y ex ministro de Seguridad.
En 2014, Lobo presentó a CS-2 como amigo y le preguntó a Pacheco si podía ayudarlos con las “autorizaciones”, pero Pacheco se negó y salió de la habitación.
Coronel
Policías Mencionados
Comenzó su cargo con la Policía Nacional de Honduras (PNH) en el año 1999, a los 21 años de edad (Doc 387 p. 8). Él era policía de bajo rango cuando comenzó la conspiración en 2004 (Doc 387 p. 13). Entre 2004 y 2008, Zelaya Romero tuvo el cargo de Inspector (Doc 387, p. 73, 85). En 2011, sirvió como subinspector de policía y jefe municipal en Colomoncagua, Intibucá (Doc 387 p. 70).
Zelaya Romero creció en El Paraíso, El Paraíso al oriente de Honduras. Zelaya Romero tuvo una carrera de 17 años con la PNH antes de su sentencia (Doc 387 p. 1).
Papel en el caso Lobo, e involucramiento en el narcotráfico:
Zelaya Romero fue el primer policía de este caso que los Rivera Maradiaga (Los Cachiros) contactaron en 2004. Después, los narcotraficantes lo contactaron de nuevo junto Mario Guillermo Mejía Vargas, otro de los policías acusados en su caso. En su papel oficial como miembro de la PNH, Zelaya Romero formó parte del grupo de policías que prometían proveer seguridad para operaciones de narcotráfico, incluso la de Fabio Lobo (Doc 35 p. 3), con la coordinación de protección policial para los hermanos Rivera Maradiaga y su operación de narcotráfico entre 2005 y 2009 (Doc 98 p. 5). Zelaya Romero acordó aceptar un sueldo de $100,000 USD para proveer información y seguridad para cargas de droga (Doc 35 p. 3). También fue mencionado por su uso de armas como parte de la operación (Doc 35 p. 6). Zelaya Romero disputó la base legal de su extradición (Doc 282).
Carlos Zavala Velasquez nació en Catacamas, Olancho, Honduras. Su padre también era miembro de la PNH. Zavala Velasquez se enlistó en la policía en 1991, en donde estudió por cuatro años (Doc 323, p. 3).
Después de que se graduó de la academia policial, trabajó con Interpol atacando delitos de narcotráfico, secuestro, y robo de vehículos en colaboración con el FBI entre 1995 y 1997 (Doc 323, p. 3). Entre 1997 y 2000, Zavala Velasquez sirvió como parte de la Unidad Especial Cobras de la PNH. Dicha unidad trabajó en colaboración con fuerzas especiales de los Estados Unidos y de Israel, con la participación de Zavala Velasquez en una operación llamada “Operación Cielo Central” (Doc 323 p. 4). Después, entre 2000 y 2001, Zavala Velasquez fue transferido al municipio de Tela, Atlántida para servir como Jefe de Policía. En 2002, lo transfirieron de nuevo para servir como oficial de inteligencia con un enfoque en crimen organizado, secuestros,y pandillas a nivel nacional (Doc 323 p. 4). Zavala Velasquez se mantuvo en este rol entre 2002 y 2005, cuando lo asignaron como asistente directo del Jefe de Policía de San Pedro Sula, Carlos Alberto Valladares, un papel en que quedó hasta 2007 (Doc 323 p. 4).
En 2007, después del asesinato de su asistente, Zavala Velasquez huyó de Honduras para pedir asilo en los Estados Unidos. Regresó a Honduras en 2008 y se reintegró a la Unidad Cobras como Jefe de División de San Pedro Sula, hasta 2010 (Doc 323 p. 6). En 2011, Zavala Velasquez fue otra vez transferido, esta vez para ser Jefe del Batallón Móvil de San Pedro Sula. En 2013, se lo nombró como Jefe de Servicios Especiales Regionales, otra unidad de la Policía Nacional cuyo enfoque era el crimen organizado, secuestro, robo de vehículos, y asuntos similares (Doc 323 p. 6). En 2014, sirvió como Jefe Adjunto de Policías para el departamento de Comayagua, y en 2015 como Jefe de Policías para la ciudad de Villanueva, Cortés (Doc 323 p. 6). En 2016, se unió a una fuerza especial “Operación Xatruch”, basada en Tocoa, Colón, que investigó conflictos agrarios y crimen organizado (Doc 323 p. 6). En 2016, fue detenido y extraditado a los Estados Unidos.
Los documentos del caso plantean que Zavala Velasquez ha estado sufriendo por Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT).
Papel en el caso Lobo, e involucramiento en el narcotráfico:
Aunque su participación en el caso de Fabio Lobo era relativamente menor, Zavala Velasquez estaba involucrado en otra operación del narcotráfico asociada con un traficante de nombre Hector Emilio Fernandez Rosa (“Don H”), en colaboración con una red criminal en la cual participaron Ruben Mejía, Victor Hugo Díaz Morales (“Rojo”), Gustavo Chinchilla (“El Bombazo”), con apoyo de otro policía de nombre de Motiño López (Doc 329 p. 2). Zavala Velasquez proveyó seguridad para esta operación desde 2009 y hasta 2012, con un sueldo entre 5 mil y 20 mil dólares para cada carga (Doc 329 p. 2). Según el testimonio del narcotraficante Fernandez Rosa en este otro juicio, Zavala Velasquez le proporcionó sobre posibles controles policiales en rutas propuestas (Doc 337 p. 13), y proveyó protección para por lo menos una carga de drogas (Doc. 337 p. 9).
En su defensa, Zavala Velasquez explicó su involucramiento en el caso Fernandez Rosa como parte de su papel policial y que había contribuido inteligencia esencial a la investigación de tal narcotraficante (Doc 329 p. 3). Sin embargo, los investigadores no encontraron ninguna documentación de su participación como parte de su trabajo formal en el transcurso del juicio (Doc 329, p. 4).
A principios del 2014, Zavala Velasquez participó en un curso de entrenamiento con unos de los otros acusados del caso, Juan Manuel Avila Meza y Mejía Vargas (Doc. 329 p. 3). En el transcurso de este curso, los mencionados acusados reclutaron a Zavala Velasquez para una operación de protección del narcotráfico, y Zavala Velasquez les confirmó su interés (Doc. 329 p. 3). En Junio del 2014 hubo una reunión entre los policías acusados del caso, Fabio Lobo, y los supuestos narcotraficantes, que realmente estaban participando con la DEA. En esta reunión, Zavala Velasquez confirmó que él planeaba participar en la operación propuesta por parte de los informantes, y negoció un soborno de 100 mil dólares (Doc 329 p. 3). A pesar de la cooperación policial, esta operación nunca pasó (Doc 206, p. 14).
Avila Meza recibió su licenciatura en derecho en 2002 (Doc 325 p. 4). En la Policía Nacional de Honduras, estaba encargado del comando regional de Tegucigalpa, Puerto Lempira (Gracias a Díos), Danli (El Paraíso) y Santa Rosa de Copán (Copán) (Doc 393 p. 140). También llevó trabajos de derecho en los departamentos legales de varias empresas privadas en Honduras (Doc 393 p. 140).
Papel en el caso Lobo, e involucramiento en el narcotráfico:
Avila Meza se involucró en el narcotráfico desde el año 2004 (Doc 97 p. 2; Doc 325 p. 18, Doc 383 p. 3). Durante esta época en que él se metió con Los Cachiros, subió el rango de la organización criminal. Al comienzo, Avila Meza contactó a Javier Maradiaga a través de Ruben Santos, después comenzó a trabajar con Los Cachiros (Doc 383 p. 5). Al comienzo, Avila Meza usó tanto su acceso a información como su título oficial de ser policía para ayudar con el tráfico de cocaína dentro de Honduras para la frontera con Guatemala (Doc 383 p. 5).
Después de un rato, Avila Meza también ofreció ayuda legal con el lavado de dinero y la evasión de incautación de activos por parte del gobierno hondureño (Doc 383 p. 6). Como parte de este papel legal, Avila Meza encontró intermediarios para comprar bienes como parte de la cadena de lavado, y también tituló una casa en San Pedro Sula a su nombre para evitar que el gobierno hondureño la incautara (Doc 383 p. 7).
En el año 2013, Avila Meza fue ascendido al cargo de reclutar abogados para los Cachiros para ayudarles con la operación del lavado y la evasión de incautación de activos (Doc 383 p. 7-8). En este cargo, Avila Meza reclutó a Marlon Duarte y Dagoberto Aspra para ayudar con el caso de la incautación del Zoológico Joya Grande según su designación bajo el OFAC (Doc 383 p. 7-8). También ayudó con la protección de la empresa INRIMAR, que también fue designada por OFAC (Doc 383 p. 8). En estos dos casos, Avila Meza recibió $20 mil por su trabajo en proteger la propiedad de Los Cachiros (Doc 383 p. 8). Además, para proteger el INRIMAR, Avila Meza contactó Los Cachiros con Juan Antonio (Tony) Hernández Alvarado, hermano del entonces presidente Juan Orlando Hernández para pedirle su ayuda con la protección de INRIMAR (Doc 383 p. 10).
Durante esta misma época, Los Cachiros encargaron a Avila Meza el cobro de deudas.
En febrero de 2014, Avila Meza ayudó con la organización de una reunión en la cual participó Devis Leonel Rivera Maradiaga y Juan Antonio (Tony) Hernandariasz Alvarado, para discutir posibilidades para lavar dinero entre una empresa fraudulenta de los Cachiros con el apoyo del gobierno Hondureño (Doc 383 p. 4). Para la reunión que forma un parte central de este caso de Fabio Lobo, Avila Meza lo dirigió, invitándoles a Mejía Vargas y López Flores y presentando el mapa con puntos de control y ofreciendo sugerencias sobre la logística de la operación (Doc 383 p. 13-16).
Mario Guillermo Vargas sirvió con la Policía Nacional por lo menos desde 2004 hasta su detención en 2009 por participación en una conspiración con narcotraficantes (Doc 98 p. 5). Mejía Vargas fue licenciado en derecho por la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Doc 242 p. 5).
Papel en el caso Lobo, e involucramiento en el narcotráfico:
Mejía Vargas formó parte de operaciones del narcotráfico desde 2004, y fue uno de los primeros policías contactados por los hermanos Rivera Maradiagas (Doc 98 p. 5). Entre 2005 y 2009, los hermanos Rivera Maradiaga contactaban a Mejía Vargas mensualmente para notificarle cuando ellos iban a recibir una carga de cocaína en Honduras (Doc 98 p. 5). Junto con Zelaya Romero, Mejía Vargas les ayudó con la coordinación policial para proveer guardias armadas para la carga, y ayudarles a evitar puntos de control en la ruta del narcotráfico (Doc 98 p. 5). Mejía Vargas recibió un sueldo que era parte del entre $70,000 y $100,000 USD que los hermanos Rivera Maradiaga pagaron por cada cargo.
En Julio del 2009, Mejía Vargas fue detenido junto con nueve otros policías cerca a Cruta, Honduras, por su papel en una operación del narcotráfico (Doc 98 p. 6). En 2016, él fue extraditado a los EEUU (Doc 98 p. 10). Mejía Vargas se declaró culpable a participación en una conspiración para la exportación de cocaína a los EEUU (Doc 242 p. 11), y describió su papel de ser <<facilitador>> de la operación (Doc 242 p. 19).
Comenzó su cargo con la Policía Nacional de Honduras (PNH) en el año 1999, a los 21 años de edad (Doc 387 p. 8). Él era policía de bajo rango cuando comenzó la conspiración en 2004 (Doc 387 p. 13). Entre 2004 y 2008, Zelaya Romero tuvo el cargo de Inspector (Doc 387, p. 73, 85). En 2011, sirvió como subinspector de policía y jefe municipal en Colomoncagua, Intibucá (Doc 387 p. 70).
Zelaya Romero creció en El Paraíso, El Paraíso al oriente de Honduras. Zelaya Romero tuvo una carrera de 17 años con la PNH antes de su sentencia (Doc 387 p. 1).
Papel en el caso Lobo, e involucramiento en el narcotráfico:
Zelaya Romero fue el primer policía de este caso que los Rivera Maradiaga (Los Cachiros) contactaron en 2004. Después, los narcotraficantes lo contactaron de nuevo junto Mario Guillermo Mejía Vargas, otro de los policías acusados en su caso. En su papel oficial como miembro de la PNH, Zelaya Romero formó parte del grupo de policías que prometían proveer seguridad para operaciones de narcotráfico, incluso la de Fabio Lobo (Doc 35 p. 3), con la coordinación de protección policial para los hermanos Rivera Maradiaga y su operación de narcotráfico entre 2005 y 2009 (Doc 98 p. 5). Zelaya Romero acordó aceptar un sueldo de $100,000 USD para proveer información y seguridad para cargas de droga (Doc 35 p. 3). También fue mencionado por su uso de armas como parte de la operación (Doc 35 p. 6). Zelaya Romero disputó la base legal de su extradición (Doc 282).
Carlos Zavala Velasquez nació en Catacamas, Olancho, Honduras. Su padre también era miembro de la PNH. Zavala Velasquez se enlistó en la policía en 1991, en donde estudió por cuatro años (Doc 323, p. 3).
Después de que se graduó de la academia policial, trabajó con Interpol atacando delitos de narcotráfico, secuestro, y robo de vehículos en colaboración con el FBI entre 1995 y 1997 (Doc 323, p. 3). Entre 1997 y 2000, Zavala Velasquez sirvió como parte de la Unidad Especial Cobras de la PNH. Dicha unidad trabajó en colaboración con fuerzas especiales de los Estados Unidos y de Israel, con la participación de Zavala Velasquez en una operación llamada “Operación Cielo Central” (Doc 323 p. 4). Después, entre 2000 y 2001, Zavala Velasquez fue transferido al municipio de Tela, Atlántida para servir como Jefe de Policía. En 2002, lo transfirieron de nuevo para servir como oficial de inteligencia con un enfoque en crimen organizado, secuestros,y pandillas a nivel nacional (Doc 323 p. 4). Zavala Velasquez se mantuvo en este rol entre 2002 y 2005, cuando lo asignaron como asistente directo del Jefe de Policía de San Pedro Sula, Carlos Alberto Valladares, un papel en que quedó hasta 2007 (Doc 323 p. 4).
En 2007, después del asesinato de su asistente, Zavala Velasquez huyó de Honduras para pedir asilo en los Estados Unidos. Regresó a Honduras en 2008 y se reintegró a la Unidad Cobras como Jefe de División de San Pedro Sula, hasta 2010 (Doc 323 p. 6). En 2011, Zavala Velasquez fue otra vez transferido, esta vez para ser Jefe del Batallón Móvil de San Pedro Sula. En 2013, se lo nombró como Jefe de Servicios Especiales Regionales, otra unidad de la Policía Nacional cuyo enfoque era el crimen organizado, secuestro, robo de vehículos, y asuntos similares (Doc 323 p. 6). En 2014, sirvió como Jefe Adjunto de Policías para el departamento de Comayagua, y en 2015 como Jefe de Policías para la ciudad de Villanueva, Cortés (Doc 323 p. 6). En 2016, se unió a una fuerza especial “Operación Xatruch”, basada en Tocoa, Colón, que investigó conflictos agrarios y crimen organizado (Doc 323 p. 6). En 2016, fue detenido y extraditado a los Estados Unidos.
Los documentos del caso plantean que Zavala Velasquez ha estado sufriendo por Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT).
Papel en el caso Lobo, e involucramiento en el narcotráfico:
Aunque su participación en el caso de Fabio Lobo era relativamente menor, Zavala Velasquez estaba involucrado en otra operación del narcotráfico asociada con un traficante de nombre Hector Emilio Fernandez Rosa (“Don H”), en colaboración con una red criminal en la cual participaron Ruben Mejía, Victor Hugo Díaz Morales (“Rojo”), Gustavo Chinchilla (“El Bombazo”), con apoyo de otro policía de nombre de Motiño López (Doc 329 p. 2). Zavala Velasquez proveyó seguridad para esta operación desde 2009 y hasta 2012, con un sueldo entre 5 mil y 20 mil dólares para cada carga (Doc 329 p. 2). Según el testimonio del narcotraficante Fernandez Rosa en este otro juicio, Zavala Velasquez le proporcionó sobre posibles controles policiales en rutas propuestas (Doc 337 p. 13), y proveyó protección para por lo menos una carga de drogas (Doc. 337 p. 9).
En su defensa, Zavala Velasquez explicó su involucramiento en el caso Fernandez Rosa como parte de su papel policial y que había contribuido inteligencia esencial a la investigación de tal narcotraficante (Doc 329 p. 3). Sin embargo, los investigadores no encontraron ninguna documentación de su participación como parte de su trabajo formal en el transcurso del juicio (Doc 329, p. 4).
A principios del 2014, Zavala Velasquez participó en un curso de entrenamiento con unos de los otros acusados del caso, Juan Manuel Avila Meza y Mejía Vargas (Doc. 329 p. 3). En el transcurso de este curso, los mencionados acusados reclutaron a Zavala Velasquez para una operación de protección del narcotráfico, y Zavala Velasquez les confirmó su interés (Doc. 329 p. 3). En Junio del 2014 hubo una reunión entre los policías acusados del caso, Fabio Lobo, y los supuestos narcotraficantes, que realmente estaban participando con la DEA. En esta reunión, Zavala Velasquez confirmó que él planeaba participar en la operación propuesta por parte de los informantes, y negoció un soborno de 100 mil dólares (Doc 329 p. 3). A pesar de la cooperación policial, esta operación nunca pasó (Doc 206, p. 14).
Avila Meza recibió su licenciatura en derecho en 2002 (Doc 325 p. 4). En la Policía Nacional de Honduras, estaba encargado del comando regional de Tegucigalpa, Puerto Lempira (Gracias a Díos), Danli (El Paraíso) y Santa Rosa de Copán (Copán) (Doc 393 p. 140). También llevó trabajos de derecho en los departamentos legales de varias empresas privadas en Honduras (Doc 393 p. 140).
Papel en el caso Lobo, e involucramiento en el narcotráfico:
Avila Meza se involucró en el narcotráfico desde el año 2004 (Doc 97 p. 2; Doc 325 p. 18, Doc 383 p. 3). Durante esta época en que él se metió con Los Cachiros, subió el rango de la organización criminal. Al comienzo, Avila Meza contactó a Javier Maradiaga a través de Ruben Santos, después comenzó a trabajar con Los Cachiros (Doc 383 p. 5). Al comienzo, Avila Meza usó tanto su acceso a información como su título oficial de ser policía para ayudar con el tráfico de cocaína dentro de Honduras para la frontera con Guatemala (Doc 383 p. 5).
Después de un rato, Avila Meza también ofreció ayuda legal con el lavado de dinero y la evasión de incautación de activos por parte del gobierno hondureño (Doc 383 p. 6). Como parte de este papel legal, Avila Meza encontró intermediarios para comprar bienes como parte de la cadena de lavado, y también tituló una casa en San Pedro Sula a su nombre para evitar que el gobierno hondureño la incautara (Doc 383 p. 7).
En el año 2013, Avila Meza fue ascendido al cargo de reclutar abogados para los Cachiros para ayudarles con la operación del lavado y la evasión de incautación de activos (Doc 383 p. 7-8). En este cargo, Avila Meza reclutó a Marlon Duarte y Dagoberto Aspra para ayudar con el caso de la incautación del Zoológico Joya Grande según su designación bajo el OFAC (Doc 383 p. 7-8). También ayudó con la protección de la empresa INRIMAR, que también fue designada por OFAC (Doc 383 p. 8). En estos dos casos, Avila Meza recibió $20 mil por su trabajo en proteger la propiedad de Los Cachiros (Doc 383 p. 8). Además, para proteger el INRIMAR, Avila Meza contactó Los Cachiros con Juan Antonio (Tony) Hernández Alvarado, hermano del entonces presidente Juan Orlando Hernández para pedirle su ayuda con la protección de INRIMAR (Doc 383 p. 10).
Durante esta misma época, Los Cachiros encargaron a Avila Meza el cobro de deudas.
En febrero de 2014, Avila Meza ayudó con la organización de una reunión en la cual participó Devis Leonel Rivera Maradiaga y Juan Antonio (Tony) Hernandariasz Alvarado, para discutir posibilidades para lavar dinero entre una empresa fraudulenta de los Cachiros con el apoyo del gobierno Hondureño (Doc 383 p. 4). Para la reunión que forma un parte central de este caso de Fabio Lobo, Avila Meza lo dirigió, invitándoles a Mejía Vargas y López Flores y presentando el mapa con puntos de control y ofreciendo sugerencias sobre la logística de la operación (Doc 383 p. 13-16).
Mario Guillermo Vargas sirvió con la Policía Nacional por lo menos desde 2004 hasta su detención en 2009 por participación en una conspiración con narcotraficantes (Doc 98 p. 5). Mejía Vargas fue licenciado en derecho por la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (Doc 242 p. 5).
Papel en el caso Lobo, e involucramiento en el narcotráfico:
Mejía Vargas formó parte de operaciones del narcotráfico desde 2004, y fue uno de los primeros policías contactados por los hermanos Rivera Maradiagas (Doc 98 p. 5). Entre 2005 y 2009, los hermanos Rivera Maradiaga contactaban a Mejía Vargas mensualmente para notificarle cuando ellos iban a recibir una carga de cocaína en Honduras (Doc 98 p. 5). Junto con Zelaya Romero, Mejía Vargas les ayudó con la coordinación policial para proveer guardias armadas para la carga, y ayudarles a evitar puntos de control en la ruta del narcotráfico (Doc 98 p. 5). Mejía Vargas recibió un sueldo que era parte del entre $70,000 y $100,000 USD que los hermanos Rivera Maradiaga pagaron por cada cargo.
En Julio del 2009, Mejía Vargas fue detenido junto con nueve otros policías cerca a Cruta, Honduras, por su papel en una operación del narcotráfico (Doc 98 p. 6). En 2016, él fue extraditado a los EEUU (Doc 98 p. 10). Mejía Vargas se declaró culpable a participación en una conspiración para la exportación de cocaína a los EEUU (Doc 242 p. 11), y describió su papel de ser <<facilitador>> de la operación (Doc 242 p. 19).
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